Historia General del Pueblo Dominicano Tomo II

Historia general del pueblo dominicano 121 Sírvanos de ejemplo de su progreso la creación de la Compañía de las Indias Occidentales por Holanda en 1621, que quizás fue la llave que abrió a los holandeses las puertas a la hegemonía del Caribe. 67 La Corona hispánica, deslumbrada por la abundante producción de metales preciosos en Nueva España y Perú, no supo aprovechar estas riquezas para crear otras fuentes GH LQJUHVRV D WUDYpV GH QXHYDV LQGXVWULDV R GHVDUUROODQGR ODV H[LVWHQWHV mejorando el comercio y la agricultura; y no fue capaz de mantener su hege- monía frente a las nuevas potencias emergentes en el occidente de Europa. Estas pondrán sus ojos en el Caribe, que hasta este primer tercio del siglo XVII tenía carácter español. Y como es lógico, la Española se vio inmersa en todos estos aconteceres habiendo facilitado el gobierno de la metrópoli el DVHQWDPLHQWR GH H[WUDQMHURV HQ OD ]RQD QRUWH GH OD LVOD HQ YLUWXG GHO GHVDOR - jo ejecutado entre 1605 y 1606. 3URSXHVWD GH DXPHQWR GH ORV QDYtRV GH SHUPLVR FRQ GHVWLQR D 6DQWR 'RPLQJR Como es sabido, Santo Domingo dependía de la Península para el abas- tecimiento de la mayor parte de las ropas, víveres, herramientas y otras mer- cancías. Con frecuencia se remitían informes al Consejo de Indias por parte del Cabildo de Santo Domingo, o por los procuradores que representaban ante la Corte y el dicho Consejo a los criollos, sobre la situación del comercio insular que se vería mejorada con el aumento de navíos de permiso, es decir, TXH QDYHJDVHQ VLQ ÁRWD FRQ UHJLVWUR GH OD &DVD GH &RQWUDWDFLyQ GH 6HYLOOD La escasez de los citados navíos de registro sueltos en la carrera de Indias se debió en buena parte, en la primera mitad del siglo XVII , a la oposición ejercida por los comerciantes sevillanos, agrupados en el Consulado. No les LQWHUHVDED XQ FRPHUFLR ÁXLGR WHQLHQGR FRPR EDVH GH VXV EHQHÀFLRV XQ JUDQ DO]D GH SUHFLRV \ OD PHQRU PDVD SRVLEOH GH ÁHWDPLHQWR (OOR RULJLQDUtD TXH HO YROXPHQ GH ODV PHUFDQFtDV H[SRUWDGDV IXHVH PX\ UHGXFLGR \ TXH ODV TXH ocupaban mayores espacios tuviesen precios bajos y resultasen prohibitivas D FDXVD GHO HOHYDGR FRVWR GH ORV ÁHWHV (VWD PRGDOLGDG GH WUDQVSRUWH DXQ - TXH XWLOL]DGD SRU OD &RURQD HQ HO WUiÀFR FRQ ODV ,QGLDV GHVGH HO VLJOR XVI , fue objeto de reglamentación en 1642, indicando los puertos a los que podían dirigirse este tipo de navíos entre los que se encontraba Santo Domingo. Su frecuencia e importancia fueron tenidas en cuenta al englobarlos en un nuevo derecho de tonelaje. Haring señala la posibilidad de que la licencia o per- miso para que navegasen estos barcos constituyese, por parte de la Corona, un medio accesorio de proporcionarse, a cambio de ellos, ciertos ingresos en